lunes, 23 de junio de 2008

Señoritas: ¡estamos cansados!

Así es señoritas, me dirijo a ustedes, a esos seres con curvas voluptuosas (las más congraciadas) que utilizan su belleza como un arma. Si, si, señoritas, ¡ya nos dimos cuenta!
La belleza no es una virtud, ¡es una herencia! Nada les costo poseerla, mucho les va a costar mantenerla. Así que, yo les pregunto ¿Por qué tenemos que estar rogándoles por una caricia?
Claro, nosotros los trogloditas no tenemos la importancia de un empresario adinerado, ni la gracia y cultura de los grandes poetas. Pero tenemos algo que ellos no tienen. PERSISTENCIA.
Claro que si, señoritas, ya nos dimos cuenta también que la persistencia, en su maquiavélico lenguaje, es sinónimo de pesadez. Pero los más valientes, tenemos eso, ¿y encima es un defecto?
Pero no quiero dispersarme en temas que no me competen y voy a retomar lo expuesto anteriormente.
¡Sabemos de sus planes! Ya no estén tan tranquilas, sabemos que utilizan su sensualidad con fines egoístas y miserables. No les compraremos más tragos, no más cenas, de ninguna manera volveremos a ensuciarnos las manos con grasa y aceite cuando no les arranque el auto ¡Queremos algo a cambio!
Queda muy claro en la etapa del enamoramiento, la mujer enamorada sigue alerta, con la misma sagacidad que el primer día. El hombre enamorado se vuelve un pelotudo. Y digo pelotudo con un grado importante de pelotudez. Hablando, haciendo y escribiendo pelotudeces.

Ejemplo de pelotudez hablada:
Bella mujer infame: ¿me querés mucho?
Pelotudo enamorado: Si, cuchi cuchi, bubu, ¡muto muto muto te quelo!

Ejemplo de pelotudez actuada:
Bella mujer infame: ¡Ay, vida! ¡No vayas a jugar al fútbol, quedate conmigo mirando a chayanne!
Pelotudazo enamorado: Si mi amor, ahora me cambio y cantamos juntos con el karaoke, ¿Querés?

Pero no podemos evitar caer en sus trampas. Siempre sucumbimos ante un escote, un cruce de piernas, un poco de piel, un roce, una mirada tan sensual como infernal ¡Si hasta las musulmanas serian capaces con un guiño de ojo, detrás de sus largas túnicas, de hacer salir a Bin Laden de su escondite y pedir disculpas a Bush en persona!
¡Seguimos siendo pelotudos! Pero ahora, al menos, sabemos que las culpables de nuestra idiotez, son ustedes.
Su belleza tendría que ser compartida por todos, un poquito a cada uno, devuélvanle al mundo un poco de lo se les fue dado sin pedir nada a cambio.
Seguramente alguna de ustedes mirará a su lado y dirá: yo estoy compartiendo mi vida con este señor, que no es ningún pelotudo, y, de ninguna manera, estoy confabulando algún plan malvado.
¡Error! Ese señor, no solo es un pelotudo sino que no es ninguno de nosotros ¡Siempre será otro el que este al lado de una bella señorita!

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2 comentarios:

Anónimo dijo...

SI ESTAS BUENA TENES QUE APROVECHARLO
ESTAR BUENA IMPLICA NO TARDAR EN LA BARRA PARA PEDIR UNA CERVEZA
ESTAR BUENA IMPLICA QUE EL ADJUNTO TE MIRE LAS TETAS EN VEZ DE ESCUCHAR LA SARTA DE PAVADAS QUE DECIS
ESTAR BUENA IMPLICA SALIR EL FIN DE SEMANA CON 10 PESOS PARA EL REMIS Y VOLVER CON LOS 10 PESOS PORQUE TE ALCANZAN A TU CASA
ESTAR BUENA IMPLICA QUE SIEMPRE EL SABADO SI SE PONE DENSO Y ABURRIDO HAY ALGUIEN POR AHI DISPUESTO A DISTRAERTE
ESA ES LA MANERA DE RETRIBUIRLES TANTA BESTIALIDAD EN UNA

CLAUDIA FERNANDEZ

Naturalmystic dijo...

Señorita Claudia Fernández:
Usted no hace mas que confirmar mi teoría.
Veo que no solo el adjunto de su cátedra es un pelotudo, sino que usted, ademas de tener buenas tetas, rinde finales diciendo pavadas.
Por otra parte no entiendo para que rinde. Según su teoria ¡Con sus atributos alcanza para triunfar en la vida a costas de los demas!
¡Felicidades! ¡Ojala que su sueño de bailar en el caño se cumpla!
Por favor, no deje de comentar los proximos articulos!

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